...y 20 años son muchos¡Felicidades,
Zaida!
En
estos
momentos, Luis Ramos y Saritza Zambrana,
Rayda Albizu, alumna del Taller
"Buenas noches,
licenciado Manuel J. Fernós, presidente de la Universidad
Interamericanca de Puerto Rico; autoridades del Recinto Metro:
profesora Marilina Wayland, Rectora; profesora Migdalia
Texidor, Decana de Estudios; doctora Carmen Oquendo, Decana de
Estudiantes; doctora Olga Villamil, Decana de la Facultad de
Estudios Humanísticos. Buenas noches, doctora Carmen Hernández
y doctora Myrna Casas, nuestras invitadas; alumnos y
ex-alumnos del Taller de Teatro de la Inter-Metro, señoras y
señores. Bienvenidos al Centro de Acceso a la Información y a
la apertura de la exhibición ... y 20 años son muchos y a la
presentación del libro conmemorativo de estos primeros veinte
años del Taller de Teatro de la Inter-Metro. Soy Trina
Lebaldi, la gran diva de los escenarios. Esta noche, he
salido, cosa que no acostumbro hacer, de las páginas de No son
gigantes, texto para el cual mi autor me creó. Si aún no han
visto su puesta en escena, no deben perdérsela. (En secreto.)
8, 9 y 10 de mayo en el Centro de Bellas Artes de Santurce;
luego en Teatro Real de Córdoba, Argentina. Les recomienzo
Bellas Artes, queda más cerca. Esta noche, como habrán podido
percatarse, seré su Maestra de Ceremonia. Ahora sin más
preámbulos y antes de que me saquen de aquí, dejo con
ustedes al señor Ramón Toro Torregrosa, ex-alunmo del Taller,
quien tiene a su cargo la Invocación."

Ramón Toro Torregrosa, ex-alumno del Taller, tuvo a su cargo
la invocación.
"Amantísimo Padre Celestial, en esta noche nos
reunimos ante ti, para darte las gracias por permitirnos
celebrar nuestros logros, obtenidos durante los primeros
veinte años del Taller de Teatro de la Inter-Metro. Deseamos
agradecerte por un día más de vida, e invocar tu presencia
para que nos ilumines durante esta actividad, la cual
ponemos en tus manos. Gracias por darnos, día tras día,
hermosas memorias que juntos celebramos y compartimos en la
noche de hoy. Dirígenos con tu sabiduría, como nos has
dirigido en cada una de las puestas en escena, y en
nuestras vidas. Permite Señor, que tu manto sagrado bendiga
esta actividad. Señor, te lo pedimos humildemente.
Amén."
Orlando Sánchez Vega, ex-alumno del Taller
"Gracias, joven. Buenas noches, soy Molière, disfrazado de
mi personaje, Argan, el enfermo imaginario. Me gustaría
hablar un rato con vosotros de todos los males que
agobian mi cuerpo, pero me han dicho que debo limitarme a lo
que está aquí escrito. Mejor así, porque estoy muy enfermo.
En estos momentos, el presidente de Institución os dará un
saludo."



La Dra. Olga Villamil, Decana de la Facultad de
Humanidades, la Dra. Carmen Oquendo, Decana de Estudiantes, y
el Lcdo. Manuel J. Fernós, presidente de la Universidad
Interamericana, ofrecieron un saludo a los asistentes al acto.



Un nitrido grupo de personas ─alumnos,
ex-alumnos, amigos y autoridades universitarias─ dijeron
presente.


La Dra. Carmen Hernández, amiga del
Taller, tuvo a su cargo la presentación del autor del libro ...y 20 años son muchos,
que presentó la Dra. Myrna Casas, escritora y Gerente
General del Centro de Bellas Artes Luis A. Ferré.
"Gracias
por su presencia esta noche en la que celebramos la publicación del texto que
recoge todas las obras, montajes, puestas en escena del
Taller de Teatro de la Inter Metro. Es una compilación de
una trayectoria de veinte años, la que he seguido muy de cerca, gracias a
la amistad que me une a Antonio García del Toro, profesor,
dramaturgo y director del Taller. Conozco a Antonio desde
agosto de 1984 cuando ambos iniciamos labores docentes en la
Universidad del Turabo. Muy pronto aquel profesor
mayagüezano llamó mi atención
por su dedicación a los estudiantes y por el esmero
e
ilusión
con
que preparaba cada uno de sus cursos. Recuerdo
la primera vez que escuché una conferencia suya en la que
divulgó aspectos sobresalientes de su investigación sobre
mujer y patria en el teatro puertorriqueño, tema con el que
cautivó a la audiencia. Desde
ese momento supe que el Teatro, tanto en Puerto Rico como en
Italia, había sido parte esencial en su formación académica,
pero más que eso, aprendí que
el Teatro ha sido y es su gran pasión.
La oportunidad de trabajar
juntos me permitió ser su colega y compartir proyectos
académicos de interés mutuo; me permitió ser coautora de una
de sus numerosas publicaciones dirigidas a la enseñanza del
español; me permitió ser su estudiante oyente en la clase de
italiano básico, pero sobre
todo me permitió iniciar una amistad, que
ha
perdurado por ya casi veinticinco
años. Como amigo, Antonio siempre ha estado
presente. Ha sido precisamente su presencia
y su compañía lo que me ha hecho asomarme al mundo
del teatro con una nueva mirada, desde una perspectiva
diferente. Antes de conocer su
trabajo, una puesta en escena
me parecía producida por arte de magia. Ahora sé cuánto
esfuerzo encierra cada producción, cada movimiento, cada
línea. Con él empecé a disfrutar el teatro plenamente y a
conocer todo lo que ocurre trasbastidores para que una
puesta en escena sea exitosa."
De toda su labor teatral sobresale, sin
duda, su desempeño como Director del Taller de Teatro de
la Inter Metro. Antonio es un visionario. Cada año
académico reúne a un grupo de estudiantes que sin ser
especialistas en Drama tienen inclinación o interés
particular en el campo teatral. Llegan con
curiosidad, con ánimos de actuar y algunos hasta con afán
de convertirse en estrellas; traen muchas buenas
intenciones, pero se inician sin remota idea de lo que
implica el trabajo actoral. El Taller acoge a los
que aprueban las audiciones, y en seguida comienzan
las lecciones del profesor Director. Así, bajo la
supervisión de Antonio se orquesta el montaje de
cada obra y todos juntos, profesor y
estudiantes, van unificando criterios y resolviendo los
aspectos relacionados con la producción. Como director,
García del Toro toma decisiones de los conceptos
artísticos e interpretativos del texto seleccionado,
que en más de una ocasión ha sido de su autoría,
como es el caso de algunas de mis obras favoritas Un aniversario de larga
duración, El cisne de cristal y la próxima
atracción, La
primera dama,
recogidas todas en el libro que hoy celebramos.
Para asegurar la calidad de realización del producto
teatral, los estudiantes se involucran con aspectos de
tramoya, diseño de vestuario, iluminación,
creación de escenografía, producción
de sonido y, por supuesto, con la actuación. Se acercan a los textos para conocer autores
y escuelas literarias, trasfondo histórico, manifestaciones
artísticas relacionadas, en fin, todo lo que les permita
leer con una mirada atenta y crítica los parlamentos de los personajes que tienen la
responsabilidad de representar. En cada ensayo les va la
vida, pues se lleva a cabo con la misma seriedad que exige un estreno. Se pasan
líneas, se proyectan voz y mirada, se cuida la dicción, se entonan canciones, se practican
gestos, se ensayan movimientos
y bailes... Muchas, muchas veces he sido testigo del afán de Antonio porque sus
estudiantes den lo mejor de su talento. Les reconoce cuando
lo logran y es implacable cuando entiende que fallan sin
razón. Exige, exige y exige, es verdad, pero es porque da
mucho. No se puede llevar cuenta de todo el tiempo que les
destina, pues aparte de las horas del contacto presencial de
Taller, les dedica todos sus pensamientos y desvelos.
Antonio está 24 horas maquinando ideas para el Taller. Tan
pronto acaba una producción, empieza con la próxima, digo, cuando no las produce simultáneamente. Se han llevado a
cabo representaciones en teatros universitarios, nacionales
y del exterior, por lo que los estudiantes han tenido que
enfrentarse a públicos diversos, que han reconocido sus
talentos.
Antonio, como
director, los hace partícipes también del diseño del
programa, los integra en las fotos y en los comunicados de
prensa, los involucra en la publicidad, en la venta de
boletos y hasta en el manejo del presupuesto. Como vemos, el
Taller es una lección que se extiende mucho más allá del
escenario. Los estudiantes se someten, algunos bajo
protesta, a una disciplina estricta que los prepara para
afrontar con éxito otras responsabilidades académicas y
profesionales. Aprenden a improvisar al tiempo que se
enfrentan a la solución de conflictos. En los ensayos, en
las representaciones, en las giras y en los viajes
comprenden desde la importancia de ingerir una dieta
balanceada, las bondades de los modales en la interacción
social, hasta el valor de la
solidaridad y la amistad. Adquieren sentimientos de amor y
de orgullo por su Recinto, por su
Universidad, por su país. El
Taller es pues una lección de vida y Antonio es el maestro.
Por eso, al celebrar hoy el
libro con todas las obras, celebramos el Taller y celebramos
la contribución de su director, Antonio García del Toro.
Como les he dicho a sus estudiantes, Antonio es un lujo de
director. Muchas felicidades por tus veinte años de
excelente dirección."


La rectora, Prof. Marilina Wayland, hizo el cierre del acto y
dio por abierta la exhibición.
XX ANIVERSARIO